Según esos datos, Irán se dispondría a enviar una flotilla de diez petroleros, que serían cargados con crudo venezolano para exportación una vez desembarque todo su cargamento.
De esta forma, Maduro estrecharía aún más sus lazos con Irán, en momentos en los que ni Rusia ni China se atreven a desafiar las sanciones de Estados Unidos.
La remesa llegaría en un momento en el que las reservas de los últimos envíos iraníes, llegados a principios de octubre, se están agotando.
La última carga que envió Irán a Venezuela involucró solo tres buques iraníes, menos de la tercera parte que la composición total de la nueva flotilla.
La táctica que ha utilizado Irán es acercarse a Venezuela con su transpondedor apagado para evitar la localización por satélite.
El medio asegura que varias embarcaciones que transportaron combustible a Venezuela a principios de este año, incluidos Forest, Fortune y Faxon, parecen estar volviendo a Venezuela y apagaron su señal satelital hace al menos nueve días.
Fuente: Chismeven.net
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