Guardia Costera de Trinidad y Tobago asesinó a un bebé que venía en un barco de refugiados venezolanos

La reciente noticia al respecto del asesinato de un bebé venezolano de nueve meses de edad a manos de funcionarios de los Guardacostas de Trinidad y Tobago, ha generado gran controversia en redes sociales, sobre todo para quienes no ven explicación ante los disparos que los uniformados habrían ejecutado en contra de una pequeña embarcación con migrantes que tenían por intención ingresar a la isla caribeña.

De acuerdo con el portal Trinidad Express, los guardacostas están, de hecho, tratando de explicar cómo sus agentes llegaron a disparar a la embarcación, ocasionando la muerte del menor de edad y que su madre resultara herida.

La versión de los guardacostas señala que, en realidad, habrían arremetido contra el motor de la embarcación de migrantes, ya que, supuestamente, esta intentó embestir su barco. Destacaron, igualmente, que «temían» por sus vidas, por lo que habrían actuado «en defensa propia».

Sin embargo, el hecho sigue siendo investigado, muy de cerca, por autoridades de Trinidad y Tobago.

Los hechos habrían ocurrido poco antes de la medianoche del sábado 5 de febrero en aguas de la costa sureste de Trinidad, y en ellos se vio implicado el TTS Scarborough, uno de los dos buques patrulleros de la clase Cape encargados hace dos meses y desplegados para proteger las fronteras marítimas del país. Así lo refirió TrinidadExpress.

En un comunicado, emitido después del mediodía del domingo, la Guardia Costera aseguró que que, mientras patrullaba la costa sur, el TTS SCARBOROUGH detectó una embarcación que cruzó la frontera desde Venezuela. Esto ocasionó que comenzara una persecución, ya que el bote intentó eludir al TTS SCARBOROUGH.

Los funcionarios aprovecharon unas de las dos lanchas neumáticas de casco rígido de alta velocidad de 7,3 metros del que disponía el TTS SCARBOROUGH para dar caza a los migrantes. Además, recurrieron al llamado de quienes permanecían en la embarcación, a través del megáfono, de la bocina del barco, del faro de búsqueda e incluso de las bengalas. Sin embargo, el pequeño barco no se detuvo.

«Siguiendo los protocolos estándar, se emplearon a continuación disparos de advertencia por delante del buque», indica el comunicado.

Así mismo, alertaron: «En ese momento, la embarcación del TTS SCARBOROUGH intentó interceptar al buque, sin embargo, este continuó con maniobras agresivas, primero entrando en contacto con la embarcación y luego haciendo intentos de embestirla«.

Ante la negativa de ceder en su huida, los guardacostas aseguran haber disparado al motor de la embarcación para detenerla, lo que funcionó.

«Solo entonces se descubrió que había migrantes ilegales a bordo que habían permanecido ocultos y, por tanto, no habían sido vistos antes. En las comprobaciones posteriores se descubrió a una inmigrante ilegal adulta que llevaba en brazos a un bebé y que indicaba que estaba sangrando», añadieron.

Fuente: Maduradas.com